La llegada de los inquisidores provocó la resistencia de un importante sector de la ciudad. Los conversos locales hicieron planes para organizar una revuelta. Planeaban asesinar a los inquisidores “y a toda la población cristiana” el 2 de junio de 1485, cuando la procesión del Corpus Christi pasase por las Cuatro Calles, pero el complot fue descubierto antes de llevarse a cabo. Un alcalde mayor de ascendencia conversa, el bachiller De La Torre, estaba a la cabeza de la conjura; el día antes fueron descubiertos, y el corregidor Gómez Manrique hizo arrestar y colgar sin contemplaciones a seis de los implicados.
Otro episodio de oposición al Santo Oficio ocurrido en Toledo se produjo en 1519. En el mes de junio aparecieron por la ciudad unos pasquines que representaban a los inquisidores Sancho Vélez y Juan de Mendoza:
“… cercados de llamas de fuego y con unos demonios en derredor dellos y debajo un letrero en que los denunciaban por descomulgados”.
Más tarde, hacia 1538, con motivo de la reunión de Cortes celebrada en Toledo, aparecieron en la Catedral copias de un documento en el que se suplicaba al rey que moderara el celo de los inquisidores.
• Judaizante: dicho de un cristiano: que practica pública o privadamente ritos y ceremonias de la ley judaica.
• Converso: dícese comúnmente de los infieles, moros y judíos, que se reducen a la religión cristiana.
Fuentes:
Perezagua, J.: “El Tribunal de la Santa Inquisición de Toledo. Breve Historia de la Inquisición en España” (2008). Ed. Covarrubias, Toledo.
Blázquez, J.: “La Inquisición en Castilla-La Mancha” (1986). Serv. Publicaciones Universidad de Córdoba.